¿Y si el secreto para conseguir flores más grandes y mejores estuviera en el color de la luz que reciben tus plantas? Como sabes, las plantas necesitan luz para crecer, generar energía y, finalmente, florecer. Pero no solo importa que reciban luz, sino que sea el tipo adecuado. Los diferentes tipos de luz tienen efectos únicos en las plantas: desde impulsar la fotosíntesis hasta desencadenar la floración. Las longitudes de onda roja y roja lejana son especialmente importantes para las plantas con flor, ya que influyen en sus fases de crecimiento y en el rendimiento final.
En este artículo, te explicaremos la ciencia detrás de estos espectros de luz y cómo optimizarlos para cultivos en interiores.
Comprendiendo el espectro de luz que usan las plantas
Si tienes un cultivo de interior con luces de alta intensidad, como halogenuros metálicos, sodio de alta presión o LEDs, probablemente habrás notado que la luz que emiten suele ser blanca o ligeramente amarillenta.
Lo que no vemos son las longitudes de onda que trabajan en armonía para crear ese espectro blanco al que estamos acostumbrados cuando entramos en la sala de cultivo.
A continuación, se desglosan los diferentes espectros de luz y los nanómetros que representan:
● Luz ultravioleta (UV): 200–400 nm
● Luz azul: 400–500 nm (importante para el crecimiento de hojas y raíces)
● Luz verde: 500–600 nm
● Luz roja: 600–700 nm (crucial para la fotosíntesis y la floración)
● Luz roja lejana: 700–800 nm (desencadena la floración y afecta la estructura de las plantas)
Luz roja: de 600 a 700 nm
La luz roja es altamente absorbida por los pigmentos de clorofila, promoviendo la fotosíntesis. También afecta a hormonas como las auxinas, que controlan el estiramiento y el desarrollo de las flores. Sin embargo, la luz roja debe combinarse con luz azul durante el periodo vegetativo. Por sí sola, es menos eficiente para la fotosíntesis en comparación con una mezcla de luz roja y azul. Añadir luz azul equilibra la absorción de energía y el desarrollo estructural de las hojas.
Luz roja lejana (700 a 800 nm)
La luz roja lejana tiene muchos usos en la vida diaria, desde televisores y sistemas de música hasta cámaras de visión nocturna. En el cultivo, este rango de luz promueve el tamaño, la estructura y la floración de las plantas.
¿Cómo usan las plantas la luz roja disponible?
Las plantas absorben las longitudes de onda de luz a través de la clorofila. Como la luz roja y la azul son las más absorbidas, se convierten fácilmente en energía para el crecimiento o la floración.
Fitocromos: sensores de luz roja y roja lejana
Mientras que la clorofila alimenta la fotosíntesis, otro jugador clave en la respuesta de las plantas a la luz es el fitocromo, una proteína sensible a la luz que detecta las longitudes de onda roja (600–700 nm) y roja lejana (700–800 nm). Los fitocromos actúan como receptores que desencadenan procesos importantes según el tipo de luz que perciban.
● Activación por luz roja: Los fitocromos absorben luz roja y se activan, promoviendo la floración, la germinación de semillas y otras respuestas relacionadas con el crecimiento.
● Reversión por luz roja lejana: La luz roja lejana «resetea» este estado activo, ayudando a las plantas a medir la duración del día y controlar sus relojes internos.
Al comprender cómo interactúan los fitocromos con la luz roja y la luz roja lejana, podemos entender mejor cómo responde la planta a cada tipo de luz y optimizar las condiciones de iluminación para controlar la floración y mejorar el rendimiento de los cultivos, así que recalcamos en este punto más abajo:
¿Cómo responden las plantas a la luz roja?
Para crear el ambiente ideal de cultivo en interiores, necesitas un equilibrio entre luz azul (400–500 nm) y una mezcla de luz roja (600–700 nm) y roja lejana (700–800 nm). Las plantas, al estar expuestas a periodos de oscuridad, responden al espectro de luz roja de las siguientes maneras:
● La luz roja mejora la eficiencia fotosintética.
● Es altamente absorbida por las plantas.
● La luz roja desencadena la floración y la luz roja lejana controla la actividad.
● La fructificación y la floración dependen de la luz roja y la roja lejana.
● La luz roja afecta las hormonas y la morfología de la planta.
● El espaciamiento internodal se ve influido por ambos tipos de luz roja.
¿Qué tipo de luz de cultivo es mejor para plantas con flor en interiores?
Ahora que ya sabes qué espectro de luz es más beneficioso para las plantas durante el periodo de floración, conviene saber qué tipo de luz de cultivo hortícola es la mejor para uso interior. A continuación se indican las tres luces de cultivo más comunes del mercado, junto con su espectro y los nanómetros correspondientes y su relación con la producción de frutos y flores.
Lámparas de Halogenuros metálicos o Haluros metálicos (MH, Metal-Halide lamp).
Este tipo de iluminación HID (por High Intensity Lamp en inglés, traducido como Lámpara de Alta Intensidad) se utiliza, por ejemplo, en aparcamientos, estadios deportivos y farolas. Emiten una luz blanca que oscila entre 385 y 674 nm. Los halogenuros metálicos son estupendos para la fase de semillero y crecimiento de las plantas, sin embargo, deben combinarse con un LED o HPS para obtener el espectro óptimo.
Sodio de alta presión (HPS, por High Pressure Sodium en inglés):
Las luces de cultivo de sodio de alta presión han sido una opción popular entre los cultivadores de interior durante décadas, debido a que son más baratas que los LED de alta gama y también producen excelentes resultados en las circunstancias adecuadas. Las luces de cultivo HPS producen un espectro que abarca desde los 570 hasta los 590 nm, en el caso de los amarillos; desde los 590 hasta los 630 nm, en el caso de los naranjas; y desde los 630 hasta los 750 nm, en el caso de los rojos.
Luz de cultivo LED:
Las luces de cultivo LED funcionan de forma diferente a las luces HPS y MH, que emiten un espectro universal. Los diodos utilizados en estas luces pueden enfocarse y diseñarse para proporcionar la cantidad de luz que las plantas necesitan durante los periodos de crecimiento y floración. Las luces LED suelen emitir entre 400 nm y 780 nm de luz (según el fabricante) y son muy populares entre los productores de interior.
Conclusión
Nuestro consejo para la fase de floración: Es importante aplicar un espectro de luz mixto, pero sobre todo hay que centrarse en el rango de 600-800 nm durante las horas de luz. La luz roja es realmente importante para la planta, promover su floración y favorecer la maduración. Por eso recomendamos una combinación de lámparas MH y HPS o un LED que funcione principalmente en el espectro azul y rojo.